1 de Junio de 2025
ETAPA 5
En todos los viajes que he realizado llega un día en el que te das cuenta que tienes normalizadas unas rutinas que se han ido produciendo a lo largo de los días. Una de ellas es la hora de levantarte. No es necesario decidirlo la noche anterior, va a ser a las 06:00 horas. Típico horario en el mundo laboral pero, cuando haces cicloturismo y pretendes utilizar las tardes para descansar y visitar las localidades de destino, no tienes más remedio que empezar a pedalear muy pronto.
Tras el primer desayuno, a
las 7:15 nos ponemos en marcha por las calles de una ciudad dormida. Nos
alejamos por pequeños senderos pegados al canal que acaban transformándose en
una cómoda pista de tierra protegida por enormes árboles cuyas copas ocultan el
cielo.
Pero el regalo viene a
partir de las 8:30 cuando ese camino de tierra se convierte en una pista
asfaltada de unos tres metros de ancho, cubierta por los árboles y que, por su aspecto, durante
los próximos 50 km nos va a llevar hasta el centro de Toulouse.
Hoy no soportamos el calor de
días atrás. Los kilómetros se van sucediendo con el único entretenimiento de
ver el canal, a los pescadores, los patos con sus crías y hasta una nutria.
No nos prodigamos con
muchas fotos porque el carril asfaltado hace que el paisaje sea muy
parecido; aún así, precioso.
Llevamos unos días que nuestro segundo desayuno lo transformamos en bocadillos de paté. Buenísimos y variados por estas zonas.
Se nota que es domingo, el canal se ha convertido en un carril deportivo, corredores y muchos ciclistas con bicis de carretera y bastantes alforjeros, además de muchas familias con niños. Hasta las aguas calmadas del canal se han visto perturbadas por piragüistas.
Seguimos viendo muchas esclusas que vienen bien para hacer un descanso y ver cómo cumplen la función de ascensores acuáticos. Al pasar por la localidad de Montgiscard vemos un antiguo lavadero junto al canal.
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| Antiguo lavadero |
Y diez kilómetros antes de llegar a Toulouse, empiezan a aparecer las "peniches", grandes gabarras atracadas de forma permanente y que la gran mayoría hacen la función de viviendas.
Es curioso comprobar como el carril asfaltado nos conduce hasta el interior de esta gran ciudad y llega a atravesarla con gran comodidad y seguridad para los ciclistas
En Toulouse comienza el
Canal du Midi, por lo que mañana le diremos adiós y empezaremos a remontar el
Canal Lateral del Río Garona, justo en el punto donde confluyen ambos canales. Tanto tiempo pensando en recorrer el Canal du Midi y ya está hecho. Prácticamente han sido cuatro días rodando para recorrerlo en su totalidad.
A las 12:30 llegamos a nuestro alojamiento, el Hotel Le Capitole, en el casco antiguo de la ciudad. La continuidad de carriles bici por la ciudad nos ha traído hasta el hotel. Aún siendo calles de un único sentido, permiten la circulación de bicicletas en sentido contrario.
La habitación aún no está preparada. Tenemos que desmontar las alforjas, bolsas y cascos y dejarlos en el guardamaletas para ir a "estacionar las bicicletas" a un Parking vigilado y subterráneo bajo la Plaza del Capitole. Cómo un vehículo más, accedemos por el
carril destinado a bicicletas, pasando por la barrera, previa expedición del
ticket, y las anclamos en la zona destinada para bicicletas. Increíble. Esto lo
he visto en Amsterdam, pero no en España. El concepto de la bicicleta como
medio de transporte está a años luz del que tenemos en Madrid.
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| Plaza del Capitole |
Como es habitual, un merecido descanso en el hotel y paseo vespertino para cerrar el día y ver algunos lugares de esta ciudad y, como no, el Río Garona.
Se nos va el sol y llega el
agua. Los teléfonos nos avisan para irnos preparando. Estas son las predicciones del tiempo que nos espera mañana. En otras palabras: nos vamos a mojar. Pero,
por el momento, la quinta etapa ya está acabada. La comodidad de la habitación nos regala descanso. Mañana será otro día.
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